El diseño es fundamental en la evolución hacia la ingeniería circular. La ingeniería circular debe contribuir a alargar el ciclo de la vida de todos los materiales, productos e instalaciones que intervienen en la economía. De lograrse, el modelo tradicional dejará de ser lineal (extraer, usar, tirar) para convertirse en circular (ecodiseñar, reducir y reutilizar, fabricar, usar, reparar, recuperar y reciclar).
“La basura es un error de diseño” ese es uno de los mensajes clave que se ha emitido en el I Congreso nacional de ingeniería circular, que ha sido celebrado en el Paraninfo, organizado por la Cátedra SOCOTEC Ingeniería Circular de la Universidad de Zaragoza, en el que además se ha hecho hincapié en la ingeniería circular aplicada a los plásticos, la construcción circular e incluso la innovación y sostenibilidad del sector aeronáutico. Este congreso nacional constituye el primer acto de presentación de la cátedra, formada entre la Universidad de Zaragoza y la ingeniería y consultoría SOCOTEC, referente en proyectos de ingeniería vinculados a la sostenibilidad y circularidad.
La Cátedra SOCOTEC Ingeniería Circular de la Universidad de Zaragoza es pionera en España, siendo la primera cátedra que trata como aspecto específico la Ingeniería Circular. Su visión es convertirse en un referente nacional e internacional de conocimiento e innovación en ingeniería circular y desarrollo sostenible.
Juan Franco, empresario, fundador de BAC, y miembro de la comisión asesora de la cátedra afirmaba que “la circularidad empieza en las ideas, la concepción y el diseño, en definitiva en la ingeniería. Por eso, la génesis de una economía circular y sostenible es la ingeniería circular”.
El 50% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero (GEI) y más del 90% de la pérdida de biodiversidad y del estrés hídrico se deben a la extracción y la transformación de los recursos. Los objetivos de Europa para 2030 requieren logros importantes de reducción de uso de materias primas no renovables, reducción de generación de residuos y de emisiones de gases de efecto invernadero como el CO2. Para ello, es imprescindible pasar a un modelo de economía circular desde la concepción de cada elemento.
En los últimos meses, los acontecimientos vividos han puesto, aún más si cabe, en valor la dependencia de ciertos materiales y fuentes de energía. “Tenemos que optimizar su uso e introducirlas en un ciclo cerrado que nos permita ser más independientes de la coyuntura geopolítica y más sostenibles. Necesitamos ser más circulares, por motivos económicos, sociales y ambientales”, insiste José Ramón Beltrán, director de la cátedra, doctor, investigador y profesor titular de la Universidad de Zaragoza.
A este respecto, Guillem Baraut, consejero delegado de SOCOTEC, afirma que, “necesitamos hacer un cambio de modelo lineal a circular. Es necesario una revolución y que haya profesionales que se formen para liderar esta revolución. Esta cátedra busca dar solución a este reto. Esta transformación” – añade- “tiene beneficios en múltiples sentidos, a nivel medioambiental por el consumo de recursos, energía y agua, pero además esto va a tener un efecto socioeconómico en un cambio de modelo productivo, en nuevas fórmulas de negocio y por lo tanto en la búsqueda de un nuevo modelo social y económico”.
Su presentación en sociedad ha venido acompañada de la celebración de este primer congreso en el Paraninfo, concebido como un encuentro de trabajo que pretende reunir, informar, concienciar y sensibilizar a todos los agentes y partes interesadas respecto a la necesidad de la ingeniería circular para el desarrollo sostenible. “Está dirigido a todas las partes interesadas en la Economía Circular y la Sostenibilidad”, apunta Ángela Laguna, presidenta de la cátedra y directora de la División de Innovación, Energía y Medio Ambiente de SOCOTEC. “Muy en particular a las empresas y sus organizaciones que tenemos la misión de aplicar este nuevo Modelo Económico y hacerlo rentable, así como a los Ingenieros que tenemos que pensar en Circular. También a las instituciones que han de ser facilitadores y promotores del cambio. Desde luego a la comunidad universitaria y del ámbito investigador que tienen la posibilidad de establecer las bases sólidas para esta transición”.
Arturo Aliaga: 15.000 empleos que se dedican a la valorización de materiales
Por su parte, el vicepresidente y consejero de Industria, Competitividad y Desarrollo Empresarial, Arturo Aliaga, ha subrayado que en Aragón hay más de 1.200 empresas que generan más de 15.000 empleos que se dedican a la valorización de materiales, reciclado, separación de subproductos; es decir, valorizar los residuos. «Esta actividad económica ha dado lugar que, tanto en el Gobierno autonómico, donde hemos lanzado la estrategia Aragón Circular con convocatorias y ayudas concretas para proyectos de investigación industrial aplicados al desarrollo de procesos de sistemas que evitan la generación de residuos, como en el Gobierno de España, con las directivas del 15 y del 19 que han promovido el proyecto de Economía Circular, en el que estamos esperando el anuncio del PERTE y la convocatoria de ayudas para empresas que están realizando apuestas por proyectos de futuro. Hay que fabricar con medición para intentar ir a residuo cero o a residuos que permitan vías cerradas para su recuperación y posterior uso”.
Natalia Chueca: Zaragoza, designada como una de las 100 ciudades climáticamente neutras
Asimismo, la consejera de Servicios Públicos y Movilidad del Ayuntamiento de Zaragoza, Natalia Chueca, ha destacado “el importante trabajo que se está realizando en Zaragoza en la economía circular y la valorización de los residuos”. En concreto, ha indicado que “Zaragoza ha sido designada como una de las 100 ciudades climáticamente neutras para el 2030, lo que supondrá que se tendrán que implementar medidas tendentes a la neutralidad en emisiones, y dichas medidas serán ejemplo para otros puntos de España”. Además, Chueca ha resaltado otras iniciativas como la recuperación de residuos, que se realiza en el CETRUZ, Centro de Tratamientos de Residuos Urbanos de Zaragoza, donde se recupera más del 50% de todo lo que llega al vertedero y, por ejemplo, el bosque de los zaragozanos o el proyecto de electrificación de las líneas de bus urbano.
El impacto de trabajar de forma circular es inmenso para la sostenibilidad del planeta.
La Comisión EU estima que para 2030 la Economía Circular generará oportunidades económicas y empresariales, permitiendo crear nuevos empleos y ocupaciones. De hecho, se estima que habrá supuesto:
– Entre 15–30% de aumento acumulado del PIB
– Reducción de las emisiones de CO2 en un 25%
– Hasta 2 millones de nuevos puestos de trabajo
La Catedra nace con vocación de integrar el conocimiento, experiencias y potencial ya existente en el ámbito de la Economía Circular y la Sostenibilidad. De ahí, que haya creado una comisión asesora, un grupo de expertos compuesto por ingenieros, investigadores, catedráticos y personas con una alta experiencia y conocimiento, para que aporten todo su potencial en poner en valor la ingeniería circular y el desarrollo sostenible, de una forma integrada con cualquier otra iniciativa relacionad.
El evento ha sido clausurado por Joaquín Olona, consejero de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente del Gobierno de Aragón.